“Los dolores que nos quedan son
las libertades que nos faltan” anunciaba el movimiento universitario de 1918,
posicionándose como sujeto político que se hacía cargo de la historia de su
país y Latinoamérica.

Recordemos que Carlos Fuentealba
se encontraba en una manifestación sindical de ATEN (sindicato de base de
CTERA), no sólo por mejores condiciones laborales, sino también por una escuela
pública y popular, para todos y todas. En ese momento intentaba llevar a cabo
un corte de ruta para visibilizar la situación de los pibes y pibas que hoy en
día cuentan con la escuela estatal como uno de los únicos espacios públicos que
les permite decidir sobre su futuro. Es el deber
de todos aquéllos que hoy avanzamos en el mismo sentido abrazarnos a su causa y
levantarlo como estandarte frente a las inscripciones on-line, las escuelas
“containers” y los procesos de privatización y mercantilización de la educación
en la Ciudad de Buenos Aires.
Creemos que el mejor homenaje que
le podemos brindar al maestro es revindicar su lucha día a día realizando
acciones concretas para continuar ampliando y garantizando el derecho a la
educación de nuestros pibes/as. Un ejemplo concreto de esto es lo que ocurrió
hace pocos días: cuando un inmueble ocioso fue expropiado y reglamentado para
convertirse en escuela infantil en el
barrio de Parque Patricios, con el nombre de “Carlos Fuentealba”. Como vemos,
él sigue luchando por una educación pública, popular y de calidad para todos y
todas.
¡LAS TIZAS NO SE MANCHAN!
¡JUICIO Y CASTIGO A TODOS LOS RESPONSABLES!
¡CARLOS FUENTEALBA PRESENTE, AHORA Y SIEMPRE!
¡JUICIO Y CASTIGO A TODOS LOS RESPONSABLES!
¡CARLOS FUENTEALBA PRESENTE, AHORA Y SIEMPRE!
TODA PEDAGOGÍA ES POLÍTICA